TOMEMOS LAS CALLES,
¡PARA VOLVER A JUGAR Y CAMINAR!
El ombligo de Venus
Edith González Fuentes
23 de marzo de 2007
Regreso de unos felices días de descanso por Yucatán; de gozar de su hospitalidad, dulzura, tranquilidad, mmm... de sus platillos, de su oferta cultural. Nos hospedamos en una hermosa ex hacienda, cercana a Izamal. Viajar, reír, cantar, conocer Celestún, Uxmal, el Cuadrángulo de las Monjas, ¡guau!, ¡qué imponente!, ¡qué belleza!
Renté un automóvil, manejé en las extraordinarias carreteras que conectan a la zona turística, hechas durante el sexenio de Salinas de Gortari bajo el programa Solidaridad. Hasta el pueblo más humilde está comunicado por caminos donde difícilmente se encuentra un bache. Ya quisiéramos en el estado de México contar con una carretera similar para llegar a Valle de Bravo.
Mérida estuvo cercada por obra y gracia de la visita de un presidente —de familia muy wasp (white anglo saxon protestant)—, quien ha sido el promotor del surgimiento de la “generación del miedo”. Con el pretexto de la guerra contra el terrorismo, la pirámide del Duende en Uxmal fue violentada —pese a su restauración— por el servicio secreto estadounidense.
Los viajeros, desde hace cuatro años, sufrimos una exhaustiva y minuciosa revisión en los aeropuertos; es imposible abordar con una botella de agua o cualquier frasco con líquido, por tanto casi todas las maletas se tienen que documentar. Incita a la sospecha cualquier pasajero con nombre hispano o árabe.
La flota de Aeroméxico invirtió una fortuna en blindar las cabinas de los pilotos para facilitar su tránsito sobre el espacio aéreo de ese país. No sólo eso, el único lugar donde se permite fumar durante un vuelo (en cualquier lugar del mundo), es precisamente en esta cabina, excepto cuando se vuela sobre EU, que hace caso omiso de tratados y leyes internacionales. Dice: ¿Quieres pasar sobre mí? Atente a mis reglas. No importa si para efectos legales un avión mexicano es considerado territorio nacional.
En nuestra patria, los directores de escuelas públicas no pueden expulsar alumnos sin previa aprobación de un consejo escolar, de manera tal que un alumno se la piensa dos veces antes de denunciar a un compañero dedicado al narcomenudeo.
Miedo de salir a la calle a jugar. Cada día que pasa aparecen más ciudades búnker para proteger tu patrimonio y tu familia.
Nostalgia, sí, nostalgia de aquellos tiempos en los cuales subir a un avión era la realización de un sueño, de una aventura. Cuando los miradores en los aeropuertos permitían disfrutar el despegue y aterrizaje de las naves. ¡Qué nostalgia! tomar la calle para jugar, para caminar.
En nosotros está construir un país sin miedo.
Fragorosa petición a los narcos: ¡no sean gachos, no se metan con los niños!
Un breve parpadeo: más de 650 mil iraquíes muertos y casi 5 mil soldados estadounidenses. ¿Cuántos lisiados y heridos? Marchas, protestas en el mundo, y nuestro vecino, Estados Unidos, ya prepara la embestida contra Irán.
El Universal (23 de Marzo de 2007)
|